La localización es aceptable, a 15 minutos andando al centro y 20 min. de la estación de tren, la playa está cerca pero, el check in hay que hacerlo en un hotel que está a 35 min andando de la estación y a 15 minutos de los apartamentos, si vais en tren añadid, por lo menos, 20 euros más para coger un taxi que os lleve al hotel, espere a que hagáis el check in, y los lleve al apartamento. No esperéis que se den más prisa porque tenéis un taxi esperando, os dirán que ya lo ponía en la reserva.
El checkout es a las 10 am y son muy estrictos, pedimos poder dejar el apartamento más tarde y nos dijeron que no era posible porque tenían todo lleno al día siguiente (nosotros vimos varios apartamentos vacios). La única solución que nos dieron era quedarnos en la piscina pero no nos fue posible porque los únicos aseos que hay estaban bloqueados por una máquina de vending que tapaba la puerta.
No tienen consigna ni sitio donde dejar las maletas (en realidad, no tienen a nadie atendiendo el apartamento, todo ldesde el hotel), te dicen que si quieres las puedes dejar en el hotel, pero si pedís acceso a un aseo o un baño para poder disfrutar de la playa el día que volvéis os dirán que no es posible.
En general son poco hospitalarios y nada agradables en el trato. Si vais para el fin de semana el domingo estaréis con las maletas en la calle a las 10